Durante este período de tiempo,
nosotras, las autoras de este blog, hemos aprendido infinidad de cosas respecto
a las tecnologías, y cómo hacer un uso adecuado trabajando con niños de
Educación Infantil.
Hasta entonces no me había
planteado el uso de ellas, ni siquiera la presencia de éstas en el aula. Pero
la creación de este blog, el cursar una asignatura nueva, compartir opiniones, y
las demandas de nuevas aportaciones y reflexiones acerca de nuestro entorno y
de las aulas, me han permitido observar con una mirada crítica, destacando en
las diferencias que encontramos y en aquellos aspectos posibles de mejora.
Decimos que el
conocimiento nos hace libres. Podemos estar en lo cierto, pero lo que está claro es que el
conocimiento nos aporta una serie de cosas, aptitudes, valores que pretenden
mejorar con el tiempo, si hacemos una
buena aplicación y conocemos las bases de este conocimiento del que hablamos.
En realidad, algo parecido ocurre con la
tecnología.
La tecnología.
Aquella tecnología que nos
permite avanzar y vivir en un mundo cada vez más desarrollado.
Calculadoras, ordenadores, ebooks,
sustituyen cada vez más lo métodos tradicionales. Pero imaginemos que un día,
así de repente, estos aparatos dejan de funcionar, o que nuestro móvil se ha quedado
sin batería y no tenemos posibilidad de hacer una llamada. Suponemos que tenemos un gran conocimiento de
estos aparatos pero, ¿y las bases de este conocimiento?, ¿nos han enseñado a
responder a estas situaciones?
Si pensamos en estas cuestiones,
podemos darnos cuenta que no somos libres en este sentido, que dependemos de
las tecnologías, y que cuando éstas dejan de funcionar no somos nada.
¿Cuál es el problema?
La comodidad, la facilidad, la
innovación, un atractivo uso de ellas…. Dependemos y nuestros niños dependen de
las tecnologías. Sólo hay que mirar a nuestro alrededor y darnos cuenta, como
nosotras, las familias, obsequiamos a nuestros hijos con tecnología, y cómo
entra en nuestras vidas, siendo ya imposible no depender de ella.
El problema surge cuando nos
olvidamos de aquellos métodos tradicionales que hemos estado usando y pensamos
que lo nuevo es lo mejor y es lo que tenemos que conocer.
Busquemos soluciones.
Algo bien distinto sería trabajar
con los métodos tradicionales e ir incorporando estas nuevas tecnologías de
forma adecuada según las necesidades de
los niños y sus demandas.
Buscamos que ante la avería de
cualquier aparato, las personas podamos seguir trabajando hasta solucionar el
problema existente que nos hace entorpecer nuestra actividad, así como conocer
otros métodos alternativos a los tradicionales sin tener que depender de ellos
y sin crearnos una gran adicción.
Esta es muchas de las reflexiones
que me ha llevado al cursar esta asignatura y al realizar este blog. Pues
muchas veces no damos importancia a algunos temas que de verdad la tienen.
Por
eso, en mi opinión, pienso que para ser libres, un niño debe conocer, elegir y
llegar a ser crítico, sin ser influenciado por los demás, pensando que esto
último es lo mejor y lo más.
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